Turronera, Oleo s/tab, 65x54cm, 1962 A.Padrón. Col/ Gabinete Literrario. Las Palmas de G.C. |
Fue exponente del expresionismo canario, en paralelo al idealismo que la escuela Luján Pérez iniciara en su Gran Canaria natal tras la posguerra española. Antonio Padrón (1920-1968 Galdar), de formación académica, con un lenguaje indigenista propio, se inspira en el mundo rural canario, sus gentes, costumbres, juegos, creencias, mitos y supersticiones. Figuras esquematizadas de reminiscencias picassianas se integran en paisajes de naturaleza simple o entre cajas, útiles de labor, gánigos, frutos, cartas etc, generando un universo sencillo y comprensible. Color y materia con toques fauves. Amante de la soledad y del silencio se prodigó en pocas exposiciones; su obra, concentrada en su Casa Museo de Galdar y en algunas instituciones de Gran Canaria, ha sido poco difundida convirtiéndolo en un artista casi secreto. Merece ser conocido.