Añoranza

Alborada en el Puerto,S/C de Tenerife
No echo de menos los días duros o el trabajo cotidiano, tampoco a los jefes y las normas,... solo añoro a los amigos, la camaradería, las tertulias, las anécdotas... aquellos cafés junto al puerto, casi al amanecer. Qué les digo: - ¡¡¡Hasta pronto!!! - ya pasaré a recoger, entre chute y chute y cuando se pueda... lo festejamos. No lloréis por mi, ahora los amaneceres son mas bellos.