Roto

De Fausto,Cerámica-óxidos,Cerco 2010, Zaragoza (foto cedida)
Qué una parte de un todo, se supone bien tratada, se revele contra si misma y opte por la auto degradación, rompe lo racional...cuesta digerir. Cortar por lo sano y algunos retoques, es la restauración aconsejable, aunque sea la obra más preciada.
Luego, con suerte y empeño, renacerá del mismo barro... una figura nueva.
Es de esperar, madre...¡Es de esperar!